

EL RETORNO
-A NUESTRA VERDADERA IDENTIDAD-

El Segundo Gran Exodo

Al hablar de migraciones o grandes éxodos que involucraron a pueblos enteros, tenemos por obligación que referirnos al mas conocido y estudiado de todos; "El éxodo de los hebreos liderados por Moisés en su salida de Egipto". las fuentes históricas destacan como probable fecha de este singular evento el año 1447 a.e.c. para determinar esta fecha los catedráticos de la teología, se basan en las pistas aportadas por el libro de los reyes judíos (1° de Reyes 6:1). En este pasaje de las escrituras hebreas se dice que el rey Salomón comenzó la construcción del Templo en el cuarto año de su reinado y en el año 480 después que los hijos de Israel salieron de Egipto. Los historiadores toman entonces como referencia el periodo ordinario del reinado de Salomón aproximadamente en el año 967 a.e.c. cuando cumple su cuarto año en el gobierno, para realizar un sencillo calculo y así estimar nuestra fecha de interés. Entonces luego de sumar 967 + 480 se obtiene la fecha más probable del primer Éxodo ubicada como ya señalamos en el año 1447 a.e.c.
La implicación mas importante de este hecho de la antigüedad esta en resaltar la lucha inspirada por una abrumadora necesidad de un pueblo de ser liberados de una cruenta esclavitud que los sometió por mas de 400 años a una servidumbre tan opresora y aflictiva. Entre otros elementos a destacar de esta conmovedora historia; señalamos también la profunda identidad que marcaba los corazones de cada hebreo en relación con el Elohim de sus padres. Los hebreos de los tiempos de la era faraónica no negociaban su lealtad al Elohim de Abraham, Isaac y Jacob; por ofrecerla a los dioses Egipcios ni mucho menos dejaron sus costumbres y buenos hábitos heredados de sus padres temerosos de su Elohim, por asimilar una nueva cultura abominable y aberrante desde todo enfoque ético y moral como lo era la cultura egipcia.
El primer Éxodo de los hebreos liderado por Moisés representa por lo tanto la esperanza de cualquier pueblo cuya confianza puesta en YAHWEH El único Elohim de los cielos, espera con paciencia y deseo ver su cumplimiento manifestada en su libertad y el retorno a su genuina identidad. Nada sustenta esa esperanza como la garantía de una relación de pacto donde toda una nación que guarda dicho pacto es reconocida por YAHWEH; quien los escogió para hacerse de un pueblo de reyes y sacerdotes. Pero observando un poco mas la figura de Moisés como el libertador enviado a los hijos de Israel; podemos notar que realmente su vida no confluyo en gran parte con sus hermanos hebreos, mas bien al ser criado por una mujer egipcia en la propia corte faraónica, trajo como consecuencia la perdida de su identidad original y por sobre todo la asimilación inconciente de una cultura pagana y ajena a la de sus padres. Este punto de la historia del éxodo hebreo si marca definitivamente un paralelismo para muchos de nosotros en estos tiempos modernos. Puesto que la figura de la mujer egipcia representaba para Moisés lo mismo que para cualquier descendiente de Abraham que hoy anda como oveja desorientada entre las naciones, asimilando culturas ajenas a sus antepasados o por el contrario introducidos como Moisés en sistemas eclesiásticos que adoran abominablemente a otros dioses en lugar de YAHWEH EL Elohim de sus padres.
El llamado a Moisés por consecuencia represento primero; salir de los lujos de ese sistema reprobado, y regresar al desierto donde en antaño sus padres caminaban orientados y guiados por YAHWEH El Creador Todopoderoso, y en segundo termino reencontrarse con la identidad de sus antepasados recordando su linaje y ascendencia proveniente de Abraham el primer hebreo, distinguiéndose de esta manera el gentilicio de un israelita amparado por un pacto solemne y el gentilicio de un egipcio separado totalmente de ese pacto. Esta distinción sin duda no es pasada por alto, si tomamos en cuenta que en las sagradas escrituras específicamente en Éxodo 11:7, dice;
"Dijo, pues, Moisés: YAHWEH ha dicho así: A la medianoche yo saldré por en medio de Egipto, y morirá todo primogénito en tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sienta en su trono, hasta el primogénito de la sierva que está tras el molino, y todo primogénito de las bestias. Y habrá gran clamor por toda la tierra de Egipto, cual nunca hubo, ni jamás habrá. Pero contra todos los hijos de Israel, desde el hombre hasta la bestia, ni un perro moverá su lengua, para que sepáis que YAHWEH hace diferencia entre los egipcios y los israelitas"
El texto que acabamos de leer nos demuestra claramente que YAHWEH EL Elohim que llamo a Moisés entre los hijos de Israel para librarlos de su esclavitud, reconoce únicamente a los hebreos descendientes de Abraham como los legítimos herederos de los pactos y las promesas, y esto deja por defecto excluidos a todos los que por una u otra razón han usurpado una posición privilegiada que no se les fue otorgada por El Shadday de Abraham. Es decir que para pertenecer al gentilicio de una nación escogida; implica sin ninguna excepción adherirse a los pactos establecidos por El Elohim de ellos. Lo contrario seria querer pertenecer a dicho gentilicio quebrantando la relación de pacto que YAHWEH mismo estableció reemplazándolo por otro, totalmente basado en condiciones y criterios distintos y en contraposición a los del Elohim de los hebreos.
El primer Éxodo finalmente estremeció los cimientos de un imperio antiguo dando a conocer el emblemático nombre sagrado de YAHWEH a las naciones y marcando un nuevo comienzo para un pueblo cuya identidad ahora llegaría a ser notablemente manifiesta en toda la tierra.
Teniendo ahora el presente marco de antecedentes delante de nosotros, queremos introducir a cada apreciado lector de este articulo, al evento que en esta pagina web estamos anunciando en correspondencia al mensaje de los profetas de YAHWEH que proclamaron por boca de El (leer Yirmayah/Jeremías 16:15), la venida de un Segundo Gran Éxodo en las generaciones de los tiempos finales; y que involucrara nuevamente a los descendientes de Abraham dispersados hacia el Norte, Sur, Este y Oeste, los cuales así como Moisés serán sacados de los sistemas religiosos de esclavitud donde se encuentran actualmente, haciéndolos despertar en el espíritu hacia una búsqueda de su verdadera identidad, como los huesos secos en un valle de muertos que comienzan a revestirse de tendones y tejidos hasta levantarse llenos de vida similar a un ejercito de resucitados de entre las tumbas de las costumbres funestas de las naciones (leer Yejezkel/Ezequiel 37:1-14 ). Ellos serán reunificados con brazo fuerte por medio de un nuevo mar rojo que será abierto delante de la mirada atónita de los gobernantes de las naciones, bajo el cuidado y liderazgo de un nuevo libertador "Yahshua Ha Natzra" que hará subir a los hijos de Israel de los cuatro puntos cardinales y los traerá de vuelta a su tierra abriéndoles un camino donde no lo hay al sacudir de extremo a extremo los cimientos de las naciones así como lo hizo YAHWEH por medio de su siervo Moisés en los días del Faraón de Egipto.

El Segundo Gran Éxodo también representara para el concierto de todas las naciones, el preludio de la llegada tan deseada del Mesías Ungido descendiente de la simiente de Abraham, y que traerá a la tierra justicia perdurable por medio de su juicio implacable contra los que no han querido reconocer a YAHWEH el Creador del Universo, El mismo que en el pasado por intermedio de sus siervos los profetas se dio a conocer con prodigios y maravillas a las generaciones del mundo antiguo, y una ves mas por su soberana voluntad ha anunciado que dará a conocer nuevamente su glorioso Nombre a las generaciones de la era moderna que hoy en día persisten obstinadamente en ignorar las evidencia y señales del pasado despreciándolos neciamente, y provocando que estas se repitan en el presente trayendo como consecuencia un nuevo cataclismo de las edades como en los días de las generaciones de Noe y de Sodoma y Gomorra.

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Que la gracias del Elohim Eterno de Abraham les guié por medio de su Espíritu para cruzar nuevamente el mar rojo hacia un nuevo Éxodo.................................Elio Borges.